De unos años para aquí el teléfono móvil ha desbancado de una manera abrumadora a otros dispositivos como medio de comunicación y de búsqueda de información.
El primer dispositivo en sufrir la pérdida de atención del usuario fue la televisión. Ya en 2019, un informe elaborado por emarketer manifestaba que los usuarios pasaban más tiempo en el móvil que viendo la tele.
Con los móviles de última generación, lo que realmente llevamos en nuestro bolsillo es un dispositivo, en ocasiones, más potente y con más funcionalidades que muchas computadoras. Esto nos permite estar conectados a todas horas con el resto del mundo, lo cual ha producido un cambio de paradigma en las formas de comunicación entre personas y, como no, entre las empresas y sus clientes. Este nuevo escenario se caracteriza por lo siguiente:
- Portabilidad y movilidad de la información y la comunicación: en todo momento y en cualquier lugar.
- Bidireccionalidad de la comunicación: el usuario es o puede ser, a la vez, consumidor y creador de contenido.
- Comunicación no sólo de uno-a-uno, sino también de uno-a-muchos y de muchos-a-muchos, gracias a las redes sociales.
- Oferta de servicios y contenidos adaptados a localización del usuario.
LA SATURACIÓN DE LA COMUNICACIÓN
Sin embargo, las ventajas que esta nueva tecnología generaban para la comunicación e información de los usuarios se han visto mermadas e, incluso, anuladas, por la situación de saturación de la comunicación que se viene experimentando en los últimos tiempos.
Actualmente, recibimos miles de impactos publicitarios al día, siendo el número de mensajes publicitarios de tal magnitud, que la publicidad acaba siendo invisible.
En el año 2020 había en el mundo 3.900 millones de usuarios de correo electrónico que enviaron y recibieron más de 280 mil millones de correos, muchos de ellos con un contenido publicitario o con una intención de venta. Esto ha hecho que los porcentajes de atención y apertura del correo electrónico sean cada vez más bajos, convirtiéndolo en uno de los canales de comunicación menos efectivos.
LA BURBUJA DE LAS APLICACIONES
La comunicación móvil es la más eficiente. Por una u otra razón, nos pasamos varias horas al día revisando nuestros teléfonos móviles. Es por ello que, las empresas y negocios enseguida percibieron la ventaja que suponía poner a disposición de sus clientes aplicación propia para que se la instalasen en su móvil.
Se dice que la primera aplicación de éxito fue el juego “sanke”, aplicación que vino preinstalada por defecto en los teléfonos Nokia a partir del año 1998. Su objetivo era entretener al usuario, lo que comúnmente se dice “matar el tiempo”.
En 2008 Apple lazó su App Store que ofertaba 500 aplicaciones. Poco después, Google lanzaría su Android Market. Hoy en día Google Play ofrece a sus usuarios más de 2 millones de aplicaciones, cifra similar a la que ofrece la App Store de Apple.
Ahora bien, a pesar del volumen de oferta de aplicaciones a nuestra disposición, la realidad refleja que los usuarios instalan una media de tan solo 30 aplicaciones en sus dispositivos móviles, de las que solamente utilizan a diario unas cinco, siendo muy común entre los usuarios abandonar una aplicación después de un único uso.
Según el Informe Digital 2022, donde se muestran las principales tendencias digitales y el uso que se hace de internet por los usuarios, las 5 aplicaciones con más usuarios activos son, por este orden:
- Facebook Messenger
- Amazon
Estos datos vienen a coincidir con el dato de las cinco aplicaciones más descargadas según los datos de descargas históricas de las dos plataformas: App Store y Google Play.
En cualquier caso, lo que está claro es que no podemos instalar una aplicación por cada producto y servicio del que somos clientes. Por otro lado, hay un porcentaje de usuarios que no se sienten cómodos instalando aplicaciones en el móvil. Ello es así por la recopilación y uso que hacen de los datos de los usuarios, lo que, en muchas ocasiones, convierten al cliente no en el centro del producto o servicio, sino a sus datos en el producto mismo.
LAS 10 VENTAJAS COMPETITIVAS DE LAS TARJETAS DIGITALES
En los últimos tiempos, las tarjetas digitales, que se guardan en la Smart Wallet que viene preinstalada en la última versión de los sistemas operativos de los teléfonos inteligentes, se presentan como un instrumento de marketing digital sencillo, de carácter no invasivo y cuya simplificación operativa no supone reducción de prestaciones con respecto a las ofrecidas por la mayoría de las aplicaciones que se encuentran en el mercado. En esta publicación queremos destacar, como principales ventajas competitivas de este instrumento de marketing digital, las siguientes:
- No requieren de un desarrollo ni mantenimiento complicado, estando disponibles de manera inmediata.
- Su precio es asequible para cualquier tipo de negocio o empresa.
- No requieren de instalación, sólo de su descarga con un simple clic o escaneando un código QR.
- No recogen ningún dato del usuario, ni siquiera requieren de un registro o un inicio de sesión configurando un usuario y contraseña.
- Se pueden desactivar o eliminar fácilmente, así como volver a instalar, sin ocupar apenas memoria en los dispositivos móviles.
- Son fácilmente personalizables y se actualizan en tiempo real de forma automática.
- Son capaces de mostrar mensajes directos en la pantalla del móvil sin necesidad de abrir ninguna aplicación.
- Permiten la configuración de enlaces para mostrar contenidos que se encuentren disponibles en cualquier entorno de internet.
- Pueden configurarse de forma que se muestre la tarjeta en la pantalla del móvil cuando el móvil se encuentre cerca de un punto geolocalizado o cuando llegue la hora de un evento.
- Se pueden compartir por SMS, correo electrónico, WhatsApp o, simplemente, mostrando el código QR que llevan incorporado.
¿Estás de acuerdo con esta clasificación? ¿Conoces el funcionamiento de las tarjetas digitales? Te invitamos a que compruebes su funcionamiento, solicitando una demo o haciendo la prueba por ti mismo escaneando el código QR de alguno de los modelos de tarjetas de demostración que ponemos a tu disposición.